El pasado domingo 1 de septiembre se llevó a cabo la carrera de la ciudad 21K en Guatemala, un evento que logró reunir a más de ocho mil participantes, entre ellos tanto guatemaltecos como extranjeros. La competencia no solo se trató de quién llegaba primero, sino también de la determinación y el esfuerzo de cada corredor por superar sus propios límites.
En la categoría masculina, Mario Pacay, originario de la aldea San Pablo Xucaneb, Alta Verapaz, se coronó como el ganador con un impresionante tiempo de 1:04:19. Por otro lado, Viviana Aroche de Morazán, El Progreso, se llevó la victoria en la categoría femenina con un tiempo de 1:16:34. En la categoría de personas con discapacidad, Laurence Molina de Costa Rica fue el vencedor, destacando por su perseverancia y esfuerzo.
El Último Corredor: Una Historia de Actitud y Perseverancia
Sin embargo, no todos los logros en la carrera fueron de los primeros lugares. En un video compartido por el estadístico deportivo Carlos Paredes en su cuenta de TikTok, se documentó el emotivo momento en que Juan Margarito, un corredor que luchaba por completar la carrera, cruzó la línea de meta. A pesar del evidente cansancio, Juan no perdió su espíritu positivo y su actitud inquebrantable. “Aquí estoy con Juan Margarito. ¿Cómo estás, Juan?“, le preguntó Paredes. “Bien, bien, ahí en la lucha tratando de llegar a los 21 kilómetros, con actitud“, respondió Juan, mostrando que el verdadero éxito radica en no rendirse.
La Verdad Detrás del Último Lugar
Aunque Juan Margarito fue uno de los últimos en llegar, no fue el último corredor en cruzar la meta. La Municipalidad de Guatemala confirmó que la última persona en completar la carrera fue Ana Cecilia Mijangos Camey, quien terminó con un tiempo de 4:06:48. A pesar de no haber sido el último oficialmente, la historia de Juan Margarito destaca por su fuerza de voluntad y el ejemplo de nunca abandonar la lucha, sin importar cuán difícil se ponga el camino.
La carrera 21K de la ciudad no solo dejó triunfos y récords, sino también historias de inspiración y esfuerzo personal. Desde los ganadores hasta aquellos que lucharon por terminar, cada corredor mostró que el verdadero espíritu deportivo radica en la perseverancia y el deseo de superarse. Juan Margarito y Ana Cecilia Mijangos Camey son prueba de que, en la vida, lo importante no es llegar primero, sino llegar con el corazón lleno de orgullo por no haberse rendido.