Misterio en la Zona 5 de San Marcos: ¿Por qué Nadie Escuchó a los Primos Santizo?
La tragedia que envolvió a los primos José David Cardona Santizo y Walter Abraham López Santizo conmocionó a la comunidad de la colonia Los Cerezales en San Marcos. Sus cuerpos fueron localizados en un riachuelo cuatro días después de su desaparición, en circunstancias que aún generan preguntas. ¿Por qué nadie escuchó sus gritos?
Un Descubrimiento Impactante, los Últimos Momentos
José y Walter, ambos de 14 años, fueron vistos por última vez persiguiendo a su mascota durante la noche. Cuatro días después, sus cuerpos fueron encontrados en un riachuelo de aguas residuales a tan solo 300 metros de donde desaparecieron. Este espacio es una vereda estrecha y peligrosa, con un riachuelo profundo que complica el tránsito, especialmente de noche.
El Lugar del Tragedia, un Riachuelo Escondido
El riachuelo donde se encontraron los cuerpos se caracteriza por sus aguas turbias y un terreno resbaladizo. Según el Ministerio Público, los cuerpos de los jóvenes pudieron haberse quedado sumergidos en una poza, haciéndolos indetectables durante los primeros días de búsqueda. Fue hasta el 17 de diciembre que emergieron a la superficie.
Una Comunidad en Estado de Shock
Vecinos y familiares se mostraron consternados, ya que buscaron exhaustivamente en la zona días antes sin resultados. Este suceso dejó a la comunidad cuestionándose cómo algo tan trágico pudo pasar desapercibido.
¿Por qué Nadie Escuchó los Gritos? el Ruido de una Fiesta
Una vecina explicó que, la misma noche de la desaparición, una discoteca improvisada operaba en una vivienda cercana. La música a alto volumen comenzó alrededor de las 20:00 horas, coincidiendo con el horario en el que los primos desaparecieron. Este ruido constante hizo imposible escuchar cualquier otro sonido, incluyendo posibles llamados de auxilio.
Factores que Contribuyeron
La oscuridad de la noche, el terreno peligroso y la distracción causada por la música fueron factores que contribuyeron a que la tragedia pasara inadvertida.
La historia de los primos Santizo es un recordatorio de los riesgos en entornos urbanos y la importancia de la vigilancia comunitaria. Este caso también subraya cómo las circunstancias externas, como el ruido excesivo, pueden interferir en la capacidad de respuesta ante emergencias. La comunidad de Los Cerezales ahora enfrenta el reto de sanar y reflexionar sobre la necesidad de medidas que prevengan tragedias similares en el futuro.
