La Selección Nacional de El Salvador ha confirmado oficialmente que el próximo duelo eliminatorio frente a Guatemala se disputará en el Estadio Cuscatlán de San Salvador, escenario histórico del fútbol centroamericano y considerado como uno de los estadios más imponentes de la región. Este anuncio ha generado gran expectación, ya que ambos combinados nacionales se encuentran en plena lucha por obtener un boleto al Mundial de 2026, que será organizado por México, Estados Unidos y Canadá.
¿Por qué se juega en el Estadio Cuscatlán?

El Estadio Cuscatlán es el recinto deportivo más grande de Centroamérica, con una capacidad superior a los 44 mil aficionados. Su ambiente hostil para los rivales y el apoyo incondicional de la afición salvadoreña lo convierten en una verdadera fortaleza.
El motivo principal de elegir este estadio radica en su infraestructura, capacidad y simbolismo. Las autoridades deportivas de El Salvador buscan garantizar el respaldo masivo de la afición para motivar a la Selecta y, al mismo tiempo, ejercer presión sobre el rival de turno: Guatemala.
Además, la Federación Salvadoreña de Fútbol resaltó que el Cuscatlán cumple con los requisitos de FIFA y Concacaf en cuanto a seguridad, iluminación y condiciones de juego, factores determinantes para albergar partidos de clasificación mundialista.
El reto para Guatemala
Para la Selección de Guatemala, jugar en el Cuscatlán implica un desafío mayúsculo. El ambiente, la presión del público y las condiciones del terreno de juego siempre han sido factores que complican a los equipos visitantes. Sin embargo, la Bicolor, dirigida por Luis Fernando Tena, llega con la mentalidad de sumar puntos vitales que mantengan viva la ilusión de clasificar al Mundial 2026.
A pesar de que el equipo chapín sufrió un tropiezo en su debut frente a El Salvador y posteriormente empató contra Panamá, todavía se mantiene en la pelea dentro del grupo. Con seis jornadas en total en esta fase, Guatemala conserva intactas sus posibilidades de avanzar.
¿Qué necesita Guatemala para clasificar al Mundial 2026?
La fase final de la eliminatoria de Concacaf está dividida en tres grupos de cuatro selecciones cada uno. El formato establece lo siguiente:
- Clasificación directa: Los primeros lugares de cada grupo avanzan de forma automática al Mundial 2026.
- Repechaje intercontinental: Los dos mejores segundos lugares de los tres grupos tendrán derecho a disputar un repechaje contra selecciones de otras confederaciones.
Con este panorama, Guatemala necesita cumplir ciertos objetivos en los partidos restantes:
1. Ganar de visita
Los próximos duelos fuera de casa, entre ellos el choque frente a El Salvador en el Cuscatlán, son cruciales. Para aspirar al primer lugar del grupo, la Bicolor debe sumar triunfos como visitante, una tarea difícil pero no imposible.
2. Aprovechar la localía
Guatemala también tiene la ventaja de disputar partidos en condición de local. Hacer respetar su territorio y obtener el máximo de puntos posibles en casa será fundamental. Cualquier tropiezo podría complicar seriamente sus aspiraciones mundialistas.
3. Mantener solidez defensiva
Uno de los principales aspectos que el cuerpo técnico busca fortalecer es la defensa. Evitar errores y mantener la portería en cero será clave, ya que los goles encajados pueden marcar la diferencia en una clasificación cerrada.
4. Depender de sí misma
Aunque el empate ante Panamá dejó un sabor agridulce, la tabla aún le permite a Guatemala depender de sus propios resultados. Si logra ganar al menos cuatro de los encuentros restantes, podría asegurar el liderato de grupo y evitar depender de otros marcadores.
5. Alternativa del repechaje
En caso de no conseguir el primer lugar, Guatemala podría clasificar como uno de los dos mejores segundos lugares. Sin embargo, este camino es más riesgoso, ya que implicaría un repechaje intercontinental contra una selección de otra confederación.
Lo que está en juego en el Cuscatlán
El partido entre El Salvador y Guatemala no solo es un clásico centroamericano cargado de rivalidad, sino que también representa un duelo directo por la clasificación. Ambos equipos saben que una victoria podría catapultarlos hacia el sueño mundialista, mientras que una derrota podría complicar seriamente sus opciones.
El Cuscatlán promete estar repleto de aficionados salvadoreños, lo que aumentará la dificultad para Guatemala. Sin embargo, la Bicolor cuenta con jugadores experimentados y jóvenes talentos que podrían sorprender en territorio hostil.
Palabras desde el vestuario chapín
José “El Caballo” Morales, defensa de la Selección Nacional, expresó recientemente:
“Sabemos que el Cuscatlán es un estadio complicado, pero también sabemos que Guatemala tiene equipo para competir. El objetivo es claro: ganar y mantener vivas nuestras opciones de clasificar”.
El presidente de la Federación Nacional de Fútbol de Guatemala, Gerardo Paiz, también señaló que el cuerpo técnico y los jugadores tienen total libertad para decidir dónde se sienten más cómodos al jugar de local, aunque enfatizó que los partidos de visitante, como el de El Salvador, son los que marcarán la diferencia.
La confirmación del Estadio Cuscatlán como sede del partido entre El Salvador y Guatemala eleva la tensión y las expectativas rumbo al Mundial 2026. Para la Bicolor, el duelo en San Salvador será una prueba de fuego que podría definir gran parte de sus aspiraciones.
El camino no es sencillo, pero la Selección Nacional aún tiene en sus manos la posibilidad de clasificar de forma directa o, en su defecto, luchar por el repechaje. Con seis jornadas decisivas por delante, Guatemala mantiene vivo el sueño de regresar a una Copa del Mundo y escribir una página dorada en la historia del fútbol chapín.